Poetas mexicanos

Cover
P.E. Coni é Hijos, 1896 - 414 Seiten
 

Ausgewählte Seiten

Andere Ausgaben - Alle anzeigen

Häufige Begriffe und Wortgruppen

Beliebte Passagen

Seite 20 - Hombres necios que acusáis a la mujer sin razón, sin ver que sois la ocasión de lo mismo que culpáis ; si con ansia sin igual solicitáis su desdén, ¿por qué queréis que obren bien si las incitáis al mal?
Seite 21 - ¿Qué humor puede ser más raro que el que, falto de consejo, él mismo empaña el espejo y siente que no esté claro? Con el favor y el desdén tenéis condición igual, quejándoos, si os tratan mal, burlándoos si os quieren bien. Opinión, ninguna gana, pues la que más se recata, si no os admite, es ingrata, y si os admite, es liviana.
Seite 391 - A GLORIA No intentes convencerme de torpeza con los delirios de tu mente loca: mi razón es al par luz y firmeza, firmeza y luz como el cristal de roca.
Seite 201 - Comprendo que tus besos jamás han de ser míos, comprendo que en tus ojos no me he de ver jamás; y te amo, y en mis locos y ardientes desvarios bendigo tus desdenes, adoro tus desvíos, y en vez de amarte menos te quiero mucho más.
Seite 282 - Como prófugas almas de rosas, Y con gracia gentil se columpian En sus verdes hamacas de hojas. Una chispa de luz les da vida Y una gota al caer las ahoga; Aparecen al claro del día, Y ya muertas las halla la sombra. ¿Quién conoce sus nidos ocultos? ¿En qué sitio de noche reposan? ¡Las coquetas no tienen morada! . . . ¡Las volubles no tienen alcoba!...
Seite 22 - Dan vuestras amantes penas a sus libertades alas, y después de hacerlas malas las queréis hallar muy buenas. ¿Cuál mayor culpa ha tenido en una pasión errada, la que cae de rogada o el que ruega de caído?
Seite 106 - Resuena en el marmóreo pavimento del medroso viajero la pisada, y repite la bóveda elevada el gemido tristísimo del viento. En la historia se lanza el pensamiento, vive la vida de la edad pasada y se agita en el alma conturbada supersticioso y vago sentimiento. Palpita...
Seite 77 - Y cuando el sol se oculta detrás de los palmares, y en tu salvaje templo comienza a oscurecer, del ave te saludan los últimos cantares que lleva de los vientos el vuelo postrimer. La noche viene tibia; se cuelga ya. brillando la blanca luna, en medio de un cielo de zafir, y todo allá en los bosques se encoge y va callando, y todo en tus riberas empieza ya a dormir.
Seite 181 - ... de luz del venidero día condensado en la forma voluptuosa de un nuevo ser que vida recibía, una blanca figura luminosa alzóse junto a Adán. . . Adán dormía. ¡La primera mujer! Fúlgido cielo que bañó con su lumbre la mañana primer de las mañanas, ¿viste luego en la vasta muchedumbre de las hijas humanas alguna más gentil, más hechicera, más ideal que la mujer primera? La misma mano que vistió la tierra de azules horizontes, los campos de esmeralda, y de nieve la cumbre de los...
Seite 333 - Del Oriente los blancos resplandores a aparecer comienzan; la cañada suspira vagamente, el sauce llora cabe la fresca orilla del riachuelo, y la alondra gentil levanta al cielo un preludio del himno de la aurora.

Bibliografische Informationen